trata de una anciana en la cual tuvo un sueño que le rebelaba que moriría, ella que cree en las supersticiones llamo al vendedor de servicios de funeraria, argumentándole que compraría sus servicios, anotando le algunos requisitos que tomarían a la hora de ella fallecer, María dos Prezeres tenía un perrito en el cual le había enseñado a expresar sus sentimientos, por eso cuando Noi entro a la casa donde estaba el de la funeraria, María lo regaño y el lloro y se calmó, el señor quedo muy sorprendido. Más adelante María esperando la muerte no era capaz de dormir o cuando lo hacía dejaba la puerta abierta para cuando ella muera el perrito fuera a la tumba de ella, días antes maría fue al cementerio donde ella la enterrarían y enseño al perrito que los domingos fuera a la tumba de ella y llorara en sima, ya que ella no tenía quien llorara por ella, la verdad esto la tenía muy desolada, ya que era una anciana en la cual su profesional de su vida fue ser puta, por eso no tenía un hombre que la quisiera, tenía buenos amigos pero no era lo mismo, María ya cansada de esperar la muerte y al repartir todos sus bienes, no tenía nada más que hacer, cuando ella estaba saliendo del cementerio como de costumbre callo una fuerte tormenta en el cual se quedó escampando en una esquina esperando que un taxi o un autobús parara para recogerla, pero esto no pasaba, los taxis estaban fuera de servicio y los buses repletos, pero un auto paro donde ella, la llevo a su casa, pero el señor atrevido quería otra cosa.
Esta historia me llamo la atención porque no creí que alguien esperara la muerte, se sabe que uno morirá pero de esperarla es algo inusual, el autor describe esos pensamientos tan tenues que tenía maría sobre la muerte que hasta uno acepta y comprende su estado, me gustó mucho la historia ya que es un texto un poco largo pero fácil de entender y enganchador casi como los otros cuentos.
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